La llegada de Internet a los hogares ha supuesto una auténtica revolución en la manera informarnos, de comunicarnos, de consumir ocio, de realizar gestiones y trámites o de comprar. En los años 90, las instalaciones que se realizaban en los hogares eran a través de módems analógicos en los que la velocidad no era capaz de superar unos pocos Mbbps. En unos pocos años, se han desarrollado nuevas mejoras en el ámbito de las telecomunicaciones y se ha desplegado una potente inversión en infraestructuras de fibra óptica y cable coaxial suponiendo un incremento muy notable de la velocidad de transmisión de los datos. A continuación, se va a desarrollar en qué consisten la fibra óptica y cable coaxial así como sus ventajas e inconvenientes:

Características de la fibra óptica

A día de hoy es la gran apuesta de las compañías y se posicionan actualmente como una gran opción para conectar hogares y empresas a la red. El cableado de fibra óptica está elaborado con materiales transparentes como el vidrio o el plástico y su principio básico es el de transportar pulsos de luz.

Una de las principales ventajas es que las redes de fibra óptica logran una alta capacidad a la hora de transportar datos con una atenuación bastante reducida, lo cual consigue enlaces de muchos kilómetros sin que la señal pierda calidad. Asimismo, al funcionar transportando fotones de luz y no corrientes eléctricas, como es el caso del cable coaxial, presentan la ventaja de no verse afectadas por interferencias electromagnéticas, lo cual sí ocurre y puede suponer un problema en las tecnologías que incorporan cables de cobre. La luz, que viaja a través del cable óptico, estará siempre confinada dentro del mismo.

Por otro lado, la principal desventaja de las redes de fibra es la fragilidad, ya que, está fabricada con materiales muy delicados y es fácil que se pueda romper al ejercer presión sobre el cable.

Características del cable coaxial

A diferencia de la fibra óptica, los cables coaxiales transportan los datos mediante señales eléctricas, estas como se ha señalado anteriormente, presentan la desventaja de que puedan existir interferencias electromagnéticas además de poder sufrir atenuaciones de la señal a causa de las pérdidas en el cable debido a la longitud del mismo. Como posible solución a este problema, se pueden implementar amplificadores en los tramos que recorre el cable coaxial teniendo en cuenta que la instalación de estos dispositivos pueden incrementar el ruido y por consiguiente sufrir una reducción de la calidad de la señal.

Actualmente, hay que tener en cuenta que las instalaciones de cable coaxial suponen una pequeña parte de la instalación de toda la red. Este, en muchos casos, solamente se emplea en el último tramo que llega al consumidor final. De hecho, en ocasiones se implementa con la fibra para crear las denominadas redes de tipo HFC o Híbrido Fibra Coaxial.

Lo que diferencia a las redes puras de fibra óptica con este tipo de redes, es que en estas últimas la fibra óptica solo llegará a la zona residencial donde esté el usuario final y no al último punto de conexión de usuario.

A partir del punto de demarcación, en dicha zona se desplegará el cable coaxial para llegar hasta los demandantes del servicio. Es decir, la velocidad total de la red se repartirá entre los miembros de la zona, cosa que no ocurrirá con la fibra, que logrará tasas superiores en la velocidad de conexión. En este caso, el máximo teórico del cable coaxial en cuanto a transmisión de datos es de 10 Gbps en la bajada y 1 Gbps en la subida. No obstante, a nivel real de usuario estas velocidades tenderán a ser inferiores.

Conclusiones

Como resumen de lo descrito anteriormente, podemos observar que existen ventajas e inconvenientes en ambas instalaciones, dependiendo de la las necesidades podrá ser más interesante una u otra instalación. Si lo que se precisa es una alta velocidad de transmisión, evidentemente, la mejor solución será la fibra óptica, se estima además que la fibra óptica pueda incrementar notablemente velocidad en los siguientes años. No obstante, a día de hoy las instalaciones con cable coaxial son más que suficientes para satisfacer las necesidades de los hogares y se presentan como una opción más robusta.